Tengo ganas de ti

Ya me aburrí del título... ¡Weno, más novela!

Cap 4

Me dirijí al castillo de Bonnie:

Entré. Y fui hacia su habitación. Allí me encontré a alguien a la que no esperaba.

- Marceline... -susurré y por dentro mi corazón se rompió. Entonces, me vio.

- ¡Lo siento! -gritó y soltó su bajo. Corrió hacia mi.

Nunca vi esa parte tan triste de Marceline. Ella que era tan ruda.

- No, yo te pido perdón por mi comportamiento -la abracé.

- ¿Qué pasa aquí? -preguntó Bonnie.

- Nada, nada -sonreimos las dos- ¿por qué no ensayamos? -pregunté.

- Claro -respondió Bonnie.

Practicamos como  una hora la misma canción.
Se hizo tarde y decidí irme a casa a descansar porque mañana a primera hora nos recojería el autobús para la gira.
Andé hacia el castillo, pero vi una luz asombrosa que provenía del  bosque. Intenté no hacerle caso, sabía que seguramente me metería en problemas..... Pero era tan bonita... Corrí hacia ella. ¿Un portal? Sí, un portal y abajo un papel oscuro y bastante viejo, lo cogí.

Martes, 15 de Marzo de 1980

Querida Simonne Petrikov:

Hola Simonne, sé que te estarás preguntando quien soy, te lo diré. Soy tu parte contraria "Simon Petrikov", sé que tu también encontrastes una corona, te la pusistes para hacer gracia y desde entonces vistes visiones, tuvieses o no puesta la corona. A mí también me pasó esto. Desde entonces, cambié, cambié mi tono de piel tanto como el de mi pelo. También estuve investigando estos fenómenos paranormales, y mi libro se paró en la página de dos héroes, un chico y una chica que nos salvarán de esto, pero ellos no naceran hasta que no pase mucho tiempo, nosotros seguramente ya estemos muertos, nadie podrá liberarnos de nuestro dolor. Con mi fuerza creé un portal para poder pasar a tu dimensión, seguramente llamada Aaa, donde nacerá la pequeña heroína. Envió esté mensaje para decirte que los dos mundos, uno como otro se conjelarán y una parte de este desaparecerá por completo por culpa de una bomba. Te deseo suerte.

Simon Petrikov

- ¿El Rey Hielo? -me asusté.- P-pero...

- Ey, ¿¡Quién anda ahí!? -escuché una voz de niña.

- ¿Eh? -y de las entrañas del bosque salió la P. Llama.

- Sabes que no puedes estar acá  ¿no? Este sitio esta poblado de habitantes del reino de fuego ¿¡O QUIERES QUE TE CHAMUSQUE!? -amenazó.

- ¡¡¡NO!!! -no tenía más escapatoria que meterme en el portal, así que entré.

Todo parecía normal, o eso creía, me tumbé en el suelo, eran como las 03:00 de la madrugada y no podía más, me dormí.
Abrí los ojos, alguien me tocaba con un palo, me levanté.

- ¿Estás bien? -preguntó.

- ¿Finn? -me toqué la cabeza- ¿Eres Finn?

- ¿Finn? -contestó- No, no, no, yo soy Fionna, y ella es Cake.

- Dos héroes.... Un chico y una chica.... ¡Finn y .... Fionna! Ellos son los héroes -dije.

- ¿¡Qué!? -sobresaltó.

- Verás.... -le conté todo, sobre lo que leí de la carta.

- ¿Y crees que yo soy la heroína de la que habla la carta? -preguntó.

- Sí, yo pertenezco a Ooo, y allí hay un chico llamado...

- Finn, que es como yo, y él es un héroe, al igual que yo, y piensas que somos los dos héroes de la carta ¿no?

- Exacto, pero no estoy segura.... ¿Podrías llevarme a algún sitio seguro?

- Claro -respondió Fionna y caminamos por horas.

- Ey Fionna ¿Quién es ella? -preguntó un chico que me sonaba bastante.

- ¿Mar... Marceline?